Burundanga de Zocotroco
Por mediación del buen amigo Kendal Marsh, responsable de mi evolución ideologíca, llega a mi el libro March of Folly: from Troy to Viet Nam de la historiadora Barbara Tuchman. Traduzco aquí fragmentos que parafraseo intentando conservar su significado. De partida propone la laureada escritora que un fenómeno notable en la historia, sin considerar lugar ni periodo, es la persecución de políticas gubernamentales contrarias a los intereses que conducen al bienestar del cuerpo gobernado, producto de practicas antagónicas al interés de los constituyentes o el estado.
El término Folly es independiente de era o localidad, es universal y no tiene época, aunque las creencias y los hábitos de momentos particulares determina su forma. No importa si el régimen es monárquico, oligárquico o democrático, se puede producir igual y no es especifico a nación o clase. Para cualificar como Folly la política debe cumplir con tres criterios: 1- fue vista como contraproducente en su época. 2- un curso de acción alterna debe estar disponible. 3- debe ser la política de un grupo que perdure más allá de la vida de un individuo.
Apunta Tuchman que es en gobierno donde el ingenio humano encuentra más tropiezos. El desgobierno (misgovernment) se manifiesta en cuatro tipos, con frecuencia combinados: 1. tiranía u opresión, 2. ambición excesiva, 3. incompetencia o decadencia, 4. Folly o perversidad. La autora añade además un agravante que llama “woodenheadedness” que bien aguanta la traducción libertina de cabeza de granito pues la madera es muy maleable. La intransigencia se origina en la auto decepción. Consiste en evaluar una situación en términos preconcebidos fijos, ignorando o rechazando señales contradictorias. Es actuar de acuerdo con los deseos y ajeno a los hechos. Un agravante que juega un factor importante del gobierno.
Para evidenciar sus premisas, la historiadora presenta enjundiosos capítulos de momentos en que las políticas se han sostenido en contra de los mejores intereses del colectivo: la Guerra de Troya, los Papas del Renacimiento que provocaron el Protestantismo, la Perdida de las colonias Inglesas y América en Vietnam. Me deja a mi con las ganas de que atendiese el caso de los territorios Norteamericanos en uno de sus capítulos porque en esta Isla de tanto “encanto”
hay para documentar ampliamente la torpeza.
La propuesta de Tuchman inmediatamente invita a la aplicación de la situación vigente en los Estados Unidos con la presidencia de Donald Trump, que encuentra resonancia en las cuatro categorías. Pero ese es tema para otro ensayo, en esta ocasión concentro en la aplicación que las premisas tienen para el racismo y el imperialismo, asuntos que ocupan prominentemente el asunto público y que tocan de modo directo la situación de Puerto Rico.
Ambas corren hermanas en la historia en relación de mutual dependencia, una sirve de ideología, la otra de practica. Ambas se vieron como antagónicas y contradictorias en la época que adquieren prominencia. La esclavitud desde su origen tuvo la oposición de los sectores humanistas, como lo tuvo el imperialismo; pero bien sabemos que “más pudo el interés, que el amor que le tenia”. Las alternativas al momento en que inciden en la historia evidentemente no fueron ni parecen ser suficientes para contrarrestarlo. La evidencia abunda de cuan beneficiosas han sido esas prácticas para unos pocos beneficiados, nocivas, tóxicas y catastróficas para los territorios de los que han estado sometidos.
¿Qué tal si han perdurado más que la vida política de generaciones? resultaría ser que broma. Resulta patente que el delirio de superioridad, el abuso, la subyugación y el dominio de unos por otros es más viejo que la prostitución y no escoge época no región. Sobran motivos para sospechar afinidad a la condición humana, validando la brutalidad como parte constitutiva de ser y la estupidez como esencia de lo que somos, visto con notable frecuencia en las gestiones de gobierno. Y si eso no nos obliga a procurar la razón y la evidencia para encaminar la existencia, es para quitarse las zapatillas y engancharlas.
El racismo es una realidad abominable que ha determinado políticas contrarias al interés de los gobernados. El fundamento para las Leyes de Jim Crow, es el argumento jurídico para la segregación y el desafío más grande al principio de igualdad que sostiene la Constitución del Norte. Análogo a esos principios se edifica el andamiaje ideológico que comenzó a justificar la expansión del siglo 19 como Destino Manifiesto. La Misión Civilizadora y Carga del Hombre Blanco como parte de la misma bazofia. Una vez la expansión culmina con el territorio continental, la ambición conduce a nuevas fronteras, cuando el Almirante Mahan apunta allende los mares.
Comenzó con la búsqueda de guano en islas remotas, que sirvió para reclamos en el Pacifico y el Atlántico. La expansión se facilitó con la “Splendid Little War” Hispanoamericana, que rindió los despojos inmediatos de Filipinas, Guam, Cuba y Puerto Rico. Y de momento, el paladín de la democracia se encuentra enmendando la Constitución para añadir una Clausula Territorial. Un disparate que le habilita propiedades que no son parte de la nación y a cuyos ciudadanos no le corresponden los derechos plenos que garantiza esa misma Constitución.
Los cuatro puntos: despotismo, ambición desmedida, incompetencia y torpeza, son los criteritos con que la política norteamericana ha despachado sus territorios, en particular Puerto Rico, que al presente confronta una secuencia sostenida de calamidades. Aplican con amplitud en toda la historia desde la invasión del 1898, lo vemos también en la historia de los partidos políticos que ha regido nuestro destino desde que se adopto la Constitución Territorial en 1952.
Aplica también en Puerto Rico ese “woodenheadedness” que propone Tuchman, la intransigencia basada en la auto decepción al evaluar una situación en términos preconcebidos fijos, ignorando o rechazando señales contradictorias. Es actuar de acuerdo con los deseos ajeno a los hechos. Noción que aplica a los partidos de mayoría que se han alternado el poder por más del pasado medio siglo. Ambos confrontan hoy la torpeza de elaborar nociones fatuas y fallidas que confirman con amplitud su terquedad e incapacidad de reconocer los hechos.
El Partido Popular actualmente se niega a reconocer que al Estado Libre Asociado el Congreso le ha dado sentencia reiterada de defunción. De igual manera el Partido Nuevo Progresista se rehúsa a la realidad que el Congreso y la Presidencia han dicho muy claro que no se vistan que no van, que no esperen la estadidad. Ambos andan como gallinas sin cabeza, cultivando un desprestigio que se manifiesta en la perdida ineludible de seguidores y votantes. Razón por la que recurren a artimañas para alebrestar las huestes cada vez más menguadas.
Se nos abultan las realidades de la bancarrota del gobierno, la imposición de una junta imperial, tempestades devastadoras, terremotos estremecedores, una pandemia que nos tiene resguardados y temerosos, una economía con más de una década con crecimiento económico negativo agravada por el cierre, más desempleo y el colapso de la infraestructura. Encaramos la politiquería electoral en su momento cumbre, la ambición desmedida y rampante de ladrones que no pueden contenerse, al mismo tiempo que la corrupción impune y la ineptitud es crasa para atender con alguna eficiencia las necesidades de la gente y los asuntos del estado. Agravado con que la valbula de escape previa no esta disponible pues migrar al norte ha dejado de ser opción y tenemos países cerrados.
No soy amigo de lo patético, no me gusta lo catastrófico y el Apocalipsis es mi libro menos favorito, pero toca admitir que encaramos una situación muy difícil. Tampoco resulta difícil concluir que tanto de lo que padecemos este sujeto al menosprecio y subestimación de las políticas racista e imperialistas que nos rigen. Sin dejar fuera la pandilla de buscones y oportunistas que se aferran a la idea de gobernar sin poder ni presupuesto, con promesas de abundancia sin sentido.
Si fuera eso cierto, todo lo pongo una duda, toca preguntar: ¿hasta cuando?
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